
El presidente de la Federación de Funcionarios de la Salud Pública (FFSP), Martín Pereira, cuestionó la iniciativa de la candidata a la vicepresidencia de la República por Cabildo Abierto, Lorena Quintana, sobre la eliminación del aborto legal.
El integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, reflexionó sobre el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos y defendió "el acceso a la información, a la educación y el derecho a elegir", porque desde su visión, "las niñas no deberían ser madres" y "porque ninguna mujer debería ser obligada a gestar ni a parir". En el mismo sentido, Pereira abogó porque "nadie más debería morir intentando abortar".
La preocupación de Pereira se sustenta en que "nuevamente vemos voces que se alzan en contra del aborto, en busca de unos pocos votos".
El dirigente de la salud pública considera que "si se elimina el aborto legal, no se salvará ninguna vida; los abortos volverán a la clandestinidad, algunas mujeres, con el privilegio de hacerlo en una clínica privada, abortarán en condiciones seguras mientras que otras sufrirán las consecuencias de abortos mal realizados o morirán por malas prácticas".
Pereira afirmó que "existe gente que, cínicamente, dice defender la vida mientras intenta condenar moral y penalmente el aborto. Despiden a las mujeres embarazadas de sus trabajos, expulsan a las adolescentes de los centros de estudio, discriminan a las madres solteras y se oponen a los avances en género. Defendemos el derecho de las mujeres uruguayas a decidir sobre sus cuerpos, sus vidas y su futuro, sin ser juzgadas ni condenadas por ello. Y por eso, acompañamos la lucha por mantener la Ley 18.987".
En otro punto, Pereira aseguró que el movimiento sindical "dará pelea junto a las organizaciones aliadas que históricamente han dado batalla y a las mujeres que salgan a la calle si realmente se intenta avanzar contra la ley. Resistiremos por las compañeras que la clandestinidad se llevó y por las tantas que sufrieron la condena social por decidir sobre sus propios cuerpos. La vulnerabilidad social, la falta de educación sexual para poder elegir libremente, y una efectiva distribución de anticonceptivos gratuitos y de buena calidad, han llevado a muchas mujeres, especialmente las de contextos más vulnerables, a abortar en clínicas clandestinas donde no existen condiciones higiénicas ni de seguridad adecuadas para realizar procedimientos quirúrgicos. Esto ha resultado en infecciones y sangrados que, en muchos casos, han conducido a la muerte. La ley llegó, entre otras cosas, para acabar con esta realidad. Y solo educando podremos tener una sociedad más justa, donde no existan discriminaciones de ningún tipo. No se le puede dar la espalda a la militancia acumulada de miles de compañeras".
Por último, subrayó que "no hay discusión moral que le quepa a la realidad: el aborto es legal o es clandestino", al tiempo que se pronunció por "aborto legal, seguro y gratuito", para que sigue siendo ley en Uruguay.